El pollo sigue siendo la proteína más popular en los hogares españoles. Su interesante perfil nutricional, su tierna textura y su gran versatilidad en la cocina favorecen que millones de consumidores se decanten por esta carne de ave. Aunque no sólo su gran sabor y su capacidad de adaptación a multitud de recetas provocan que sea uno de los alimentos más demandados. En Avecox, donde ya te contamos cuatro beneficios que quizá no conocías de la carne de pollo, te vamos a hablar hoy de más propiedades de este codiciado animal. No te pierdas a continuación tres formas en las que las proteínas del pollo benefician tu salud según los nutricionistas.
- Enfermedades cardíacas: múltiples estudios han descubierto que incluir el pollo magro como parte de un patrón de alimentación pueden conducir a una reducción del colesterol LDL y el colesterol total, así como reducir el riesgo de enfermedades cardíacas. Los hallazgos varían entre los estudios disponibles actualmente pero los datos muestran que comer pollo tiene un efecto beneficioso o, como mínimo, neutro, es decir, que ingerir dicha carne no aumenta el riesgo de enfermedad cardíaca o accidente cerebrovascular.
- Diabetes: consumir suficiente proteína en las comidas no sólo ayuda a sentirse saciado y satisfecho, sino que también es una gran forma de controlar el azúcar en sangre. La Asociación Americana de Diabetes (ADA) recomienda que cada plato de comida contenga 1/4 de proteínas magras como el pollo.
- Cáncer: la investigación disponible sugiere que a medida que se come más carnes de ave de corral como el pollo disminuye el riesgo de ciertos tipos de cáncer. Algunos de los cánceres contra los que el pollo puede ser moderadamente protector incluyen colon, próstata, esófago, mama, sangre, gástrico, linfoma no Hodgkin y mieloma múltiple.
Así pues, no importa qué corte de pollo sea tu favorito. Debes saber que todos los cortes y formas representan un patrón de alimentación nutritivo para tu salud. La carne de pollo está considerada como una excelente fuente de proteínas de alta calidad. Para que te hagas una idea, un muslo de pollo, incluyendo tanto la carne como la piel, nos aportan 23 gramos de proteína, mientras que una pechuga de pollo deshuesada nos aportaría 31 gramos de la citada molécula compuesta por aminoácidos. Por su parte, el pollo de carne oscura es ligeramente más elevado en calorías y grasa total pero también contiene más vitaminas B6 y B12 y riboflavina, hierro, zinc y tiamina. Esto ha sido todo por hoy en el blog de Avecox. Esperemos que hayas tomado nota y aproveches todos los beneficios que el pollo aporta a tu salud. Volvemos la próxima semana con más noticias relacionadas con el sector avícola.